La semana pasada comenzamos la rehabilitación sin zanja en galería subterránea en la calle Ronda de Atocha, en el centro de nuestra ciudad. La rehabilitación con sistema de manga continua del colector se realiza en varios tramos de diversos diámetros entre 200 y 300 mm.
La principal dificultad de esta rehabilitación estriba en que el punto de rotura era de difícil acceso desde el exterior y al tratarse de distintos diámetros de tubería no se podía realizar desde un único punto de entrada, por lo que ha sido necesario realizar una cala de unos 5 metros de profundidad hasta el punto donde se encuentra la rotura del tubo. La consecuencia ha siso que el acceso tanto de los técnicos como de la maquinaria necesaria para acometer la limpieza y rehabilitación se realizó con bastante dificultad.
Una vez finalizada la limpieza del tubo, procedemos a su rehabilitación con manga de fieltro impregnada de resina epoxi y curada con agua caliente.
El proceso de impregnación de la manga se realizó en la vía pública tal y como podéis ver en las imágenes, pero la fase de introducción de la manga en el tubo fue necesario hacerla desde la galería, con la dificultad que suponía trasladar el equipo inversor hasta allí.
Esta fase del proceso se realizó con mucha rapidez y en un plazo máximo de 3 horas la manga impregnada de resina epoxi se había endurecido en su totalidad, consiguiendo formar un nuevo tubo sin juntas, totalmente estanco, cuya capacidad estructural es del cien por cien.
Los sistemas sin zanja son determinantes para el desarrollo sostenible de nuestras ciudades, pero en esta obra de rehabilitación sin zanja en galería subterránea, la utilización de estos sistemas ha sido determinantes para conseguir finalizar con éxito, ya que se trata de una localización en el centro de Madrid por lo que era imposible recurrir a los sistemas tradicionales de pocería con zanja.
Otra posibilidad que se estudio, fue la posibilidad de construir una mina para acceder hasta el punto de rotura, pero al no existir planos actualizados de la zona en los que poder cotejar las distintas acometidas y canalizaciones de agua, luz, fibra óptica, etc. que pudieran obstaculizar el proceso de excavación, se decidió que no es una opción viable.
Una vez más, las tecnologías sin zanja demuestran ser la opción más sensata, rápida y sencilla para la resolución de incidencias en la red de alcantarillado de las grandes ciudades, en las que realizar apertura de zanja se prácticamente inviable, por las consecuencias negativas que supondría en el día a día de nuestras ciudades.